Lesbia
Elizabeth Arroyo Núñez
Carné
201115096
1.¿Cuál es la situación de violencia que afecta a la juventud?
La creciente ola de violencia y criminalidad
que enfrenta el país está afectando significativamente a la adolescencia y a la
juventud. En 2009 murieron en forma violenta 6,498 personas, de las cuales
2,368 eran menores de 25 años y 720 eran mujeres.
La mayoría de éstos crímenes se cometió con
arma de fuego y no fueron investigadas ni perseguidas por el sistema de
justicia penal. Por lo general el sistema
de justicia muestra poca capacidad y limitados recursos para investigar y
castigar los delitos contra la vida, particularmente los homicidios de jóvenes.
Los estudios muestran que solo 2 de cada 10 homicidios alcanzan una sentencia judicial. (Poljuve,
2010 pag.16)
2.¿Realmente la Juventud y la adolescencia se encuentran más vulnerables
a la violencia?
La juventud y adolescencia se encuentran más
expuestos a la violencia debido a su desventaja frente a los adultos, y en el
caso de las adolescentes y las jóvenes debido a su desigualdad como género. En
muchos casos la adolescencia y juventud son víctimas de violencia física,
sexual, psicológica, descuidos y tratos negligentes. Ésta forma de violencia
ocurre en el hogar, la escuela, la calle y ambiente laboral.
Sin embargo no toda la adolescencia y juventud
están expuestos a la violencia de igual manera, existen grupos que se
encuentran en situación de mayor vulnerabilidad
y desventaja social. Entre ellos, quienes han sido abandonados por sus
familiares, viven o se encuentran en la calle, están fuera del sistema escolar.
Los y las jóvenes que sufren explotación sexual y comercial , quienes migran en
condiciones precarias y quienes viven en condiciones de hacinamientos en zonas
marginales. (Poljuve, 2010 pag.17)
3.¿Cuáles son los factores de riesgo que contribuyen a
la violencia?
- Violencia intrafamiliar: parece ser una práctica frecuente y poco denunciada en los hogares guatemaltecos. En el año 2008 se reportaron 23,721 casos de violencia intrafamiliar, de éstos 21,431 casos las víctimas eran mujeres, quienes fueron agredidas por su esposo, conviviente o ex cónyuge. En éstos casos, cabe también mencionar que los hijos también son víctimas de dicha violencia. En muchas ocasiones la victimización de la niñez, adolescencia y juventud en la familia tiene como consecuencia principal el abandono o expulsión de los hogares. Resulta muy frecuente que éstos niños, adolescentes y jóvenes carezcan de vínculos familiares y comunitarios (abrigo, estudio, trabajo, etc.) encontrándose expuestos a ser violentados nuevamente o bien, a involucrarse en actividades violentas o ilícitas.
- Deserción escolar y violencia en centros educativos: La deserción escolar es un problema serio en el país, aunque la educación primaria alcanza un 95% de la población en edad escolar de 7 a 12 años, solo el 41% finaliza el sexto grado de primaria. El sistema educativo no ha podido frenar esta problemática y cada año mas de 204 millares de niños y niñas abandonan la escuela. El abandono escolar está asociado, principalmente con la situación económica de las familias; la pobreza es la principal condicionante para que los niños accedan y persistan en la escuela. En cuanto a la violencia en las escuelas, se conocen casos en los que se acometen golpizas, abusos sexuales, extorciones, entre otros , que se producen por alumnos y en algunos casos de parte de los educadores hacia los alumnos. También se conocen casos de rivalidad y confrontaciones físicas entre estudiantes de un establecimiento y otro. En algunos casos los educadores saben o perciben la violencia que tiene lugar contra los niños y niñas en el hogar, la escuela, la comunidad, sin embargo y pese a tener la obligación legal de actuar para garantizar la integridad de éstos continúan inactivos, convirtiéndose de esa manera en cómplices de dichas violaciones.
- Desempleo y subempleo juvenil: uno de los mayores desafíos para la juventud guatemalteca es ubicarse en un puesto de trabajo justo, además, las oportunidades de inserción al mundo laboral son escasas. Entre otros obstáculos para acceder a puestos de trabajo se encuentra la escasa formación y tecnificación, sumada a la creciente oferta de mano de obra, las bajas demandas laborales y prácticas discriminatorias y excluyentes de contratación basadas en estereotipos. Para quienes no logran colocarse laboralmente, las situación se agrava, encontrando en el involucramiento en actividades ilícitas un acceso fácil y rápido a recursos económicos, que palian situaciones de carencia en el corto plazo. Los jóvenes que se involucran en tales actividades no toman en cuenta que las mismas conllevan procesos de exclusión y estigmación aún mas focalizados , además de su posible captación por el sistema de justicia, y en casos extremos la pérdida de la vida.
- Fácil acceso y consumo de alcohol y drogas: el fácil acceso y uso de alcohol y otras drogas que producen adicción y dependencia por la adolescencia y juventud constituye un problema grave de salud, además de un problema de seguridad ciudadana. Según estudios realizados por el patronato antialcohólico y secretaria ejecutiva de la vice-presidencia de la República de Guatemala, en promedio, la población guatemalteca se inicia en el consumo de licor a la edad de 15 años.
- Proliferación ilegal de armas de fuego: Guatemala cuenta con una ley de municiones y armas vigente, no obstante se carece de controles efectivos, sobre la tenencia, portación y registro de armas de fuego, lo cual le facilita a la población el acceso y uso de éstas sin un control efectivo por parte de las fuerzas de seguridad del estado. Sumando a ello, los sistemas de investigación criminal carecen de un registro electrónico que contenga las huellas balísticas de la totalidad de armas registradas e incautadas, lo cual dificulta la investigación de hechos delictivos cometidos con armas de fuego, esto limita a la PNC en el desarrollo de sus actividades de investigación.
- Migración en condiciones precarias: Guatemala reporta el mayor índice de deportaciones a nivel centroamericano, durante el 2009 fueron deportadas 28,786 personas, quienes al retornar al país no contaban con una fuente de ingresos para la manutención de sus familias. El estado no posee programas específicos de apoyo para ésta población , ni para extranjeros que se encuentran en tránsito hacia México y Estados Unidos. Otro proceso creciente es la migración de personas adolescentes y jóvenes desde el campo a la ciudad en busca de empleo, lo cual ocasiona el incremento de personas en la economía informal, debido a la escasa oferta laboral existente, así como mayor aglomeración en las ciudades, lo que provoca mas hacimiento.
- Escasos espacios de participación juvenil: existen pocos espacios que estimulen la participación social y política de la adolescencia y la juventud, aunque hay expresiones juveniles en los barrios urbanos y en las comunidades indígenas, quienes suelen manifestarse a través del arte, la música, la pintura, el deporte, la religión, lo lúdico y la educación formal y popular. Estas agrupaciones en algunos casos, mantienen relaciones de coordinación con los gobiernos municipales, organizaciones de la sociedad civil y con organismos de la cooperación internacional. constituyen un medio de expresión y participación. (Poljuve, 2010 pag.21-30)
4.¿Cuáles son los tres niveles de prevención de la violencia?
Prevención primario:
está orientada
a promover el desarrollo integral de la niñez y la juventud para evitar
que sea víctima de la violencia o se involucre en hechos violentos. Este tipo
de prevención incluye el acceso de la salud, la educación, el empleo justo, el
arte, la cultura, y la recreación. La
prevención primaria también se conoce como: prevención social.
Prevención secundaria: está orientada a proteger grupos vulnerables o en situación de riesgo
social, como la adolescencia y juventud
que vive en situación de calle, quienes migran en condiciones precarias,
personas con adicciones, personas explotadas sexualmente, adolescentes y jóvenes fuera del sistema escolar y
desempleados. Éste tipo de prevención también incluye a grupos especiales como
las maras y pandillas o agrupaciones que manifiestan actitudes violentas. La
prevención secundaria también se le conoce como prevención focalizada.
Prevención terciaria: comprende un conjunto de estrategias
que previenen la reincidencia de adolescentes y jóvenes que han cometido un
delito. Ésta prevención promueve el proceso de inserción y reintegración social
de personas que están siendo procesadas por algún delito o han recibido alguna
sanción o condena penal, con miras a evitar
que vuelvan a cometer un delito o provocar un daño social.
5.¿Cuáles son los principios para prevenir la violencia?
Respeto a la legalidad
y a los derechos humanos: implica que el ejercicio del poder público debe realizarse en el marco
de lo que indican las leyes y no en dependencia de la voluntad de un gobierno o
de los particulares, es decir, nadie es superior a la ley.
Interés superior de la
adolescencia: éste principio está regulado en la legislación
internacional y nacional que promueve y protege los derechos de la
adolescencia. Se refiere a que el estado deberá proveer una protección especial
y disponer de oportunidades y servicios para garantizar su desarrollo integral,
el respeto a sus derechos, su formación integral en condiciones de libertad y
dignidad permitiéndole el desenvolvimiento de sus potencialidades.
Respeto al pluralismo
y a la diversidad: éste principio supone el respeto al derecho a
no se discriminado por condición étnica, cultural, religiosa, socioeconómica,
orientación sexual y edad. En términos generales implica el reconocimiento de
que Guatemala es un país multiétnico y plural en el que coexisten sistemas de
justicia claramente diferenciados y además, distintas juventudes.
Equidad de género: se refiere a la igualdad de derecho que mujeres y hombres deben ejercer
en el uso y acceso a los bienes,
recursos y servicios, asi como en la participación de espacios de toma de
decisiones. Dado que tradicionalmente las mujeres han enfrentado una situación
de desventaja con relación a los hombres, esta igualdad debe ser en el campo
social, político, económico y cultural,
facilitando a las mujeres, de manera primordial el acceso con justicia e
igualdad a satis factores sociales.
Enfoque integral: éste principio se refiere a que el
desarrollo de la adolescencia y la juventud requiere un enfoque holístico que
promueva el acceso a la salud, la educación, el empleo, la recreación, la
vivienda y la seguridad. En éste sentido las políticas sociales destinadas a
ésta población deben diseñarse e implementarse de forma coordinada y no de
manera sectorial. La violencia debe tratarse como un enfoque integral, lo cual
incluye medidas de prevención, seguridad ciudadana, rehabilitación y
restauración. (Poljuve, 2010 pag.36-39)
6.¿Cuáles son los criterios para prevenir la violencia?
Intervenir en el
desarrollo de la niñez, la adolescencia y la juventud: los niños, adolescentes y jóvenes menores de
24 años de edad, representan el 61% de la población del país. Esto significa
que Guatemala es un país con gran potencial en su población infantil y juvenil,
de manera que es fundamental intervenir
en su desarrollo integral.
Priorizar la
atención a grupos vulnerables: entre los grupos vulnerables se
encuentran: las víctimas de violencia
intrafamiliar, violencia sexual, y explotación sexual comercial, quienes viven
o se encuentran en la calle, quienes están fuera del sistema escolar, las y los
jóvenes desempleados y que viven en situaciones de pobreza; quienes sufren explotación económica o están
expuestos a cualquier trabajo que represente cualquier riesgo a su salud e
integridad; quienes migran en
condiciones precarias, así como grupos que manifiestan algunas actitudes
violentas.
Priorizar la
prevención en localidades y comunidades más afectadas por la violencia y la
exclusión social: las municipalidades y las
autoridades locales deben desempeñar un rol primordial en los planes y
programas de prevención. Dichos planes y programas habrán de basarse
en diagnósticos previos que recojan las percepción de los habitantes del lugar
con relación a la violencia y sus posibles soluciones. La comunidad, incluyendo
jóvenes deben de participar activamente en el diseño, implementación y
monitoreo de los programas de prevención. Se requiere que las acciones de
prevención municipal y local respondan a
los lineamientos generales del prevención del Gobierno central.
Cooperación y
responsabilidad social: es importante incluir a los
programas de prevención a sectores sociales relevantes como las iglesias, el
sector privado, los medios de comunicación social, los partidos políticos, las
organizaciones no gubernamentales (ONG), y las asociaciones y/o colectivos
juveniles. Las personas adolescentes y los jóvenes deben ser actores clave en
construcción y promoción de una cultura de paz. (Poljuve,
2010 pag.39-42)
7.¿cuáles son las 12 estrategias de prevención de la violencia en
nuestro país?
1. Prevenir la
violencia en el hogar, la escuela y la comunidad: impulsar campañas de información sobre los
derechos de la niñez , la adolescencia y la juventud, así como los servicios de
atención a víctimas, promover campañas
públicas contra la violencia intrafamiliar y el maltrato infantil, promover
programas destinados a prevenir la violencia sexual contra la niñez,
adolescencia y juventud, programas para prevenir la violencia en los centros
educativos.
2. Prevenir la
deserción escolar y promover la
educación alternativa para adolescentes y jóvenes que se encuentran fuera del
sistema educativo: promover la permanencia escolar en el nivel
primario y secundario, ampliar y mejorar los programas de educación alternativa
y extraescolar, incrementar y facilitar el acceso a becas escolares e
incentivos financieros para grupos vulnerables o en situación de riesgo social,
promover la educación en valores, la conciencia pacífica y la transformación de
conflictos en los centros educativos,
impulsar escuelas para padres y madres.
3. Promover el arte,
la cultura, el deporte y la recreación como elemento para el desarrollo
personal y como instrumentos para prevenir la violencia: promover en las comunidades espacios de intercambio cultural, artístico
y lúdico; promover el arte, lo lúdico,
la cultura y el deporte en los centros educativos; impulsar programas deportivos que contribuyan
al intercambio generacional y la convivencia comunitaria, priorizar la apertura del programa escuelas
abiertas en las zonas más afectadas por la violencia, promover la enseñanza de
los valores culturales del diálogo, el respeto a la vida y la convivencia
pacífica.
4. Generar oportunidades
de formación para el trabajo e inserción laboral para la adolescencia y la
juventud: mejorar los sistemas de información y
orientación laboral dirigidos a la adolescencia y a la juventud; fortalecer y
subsidiar los programas educativo-laborales que ofrece la sociedad civil a
jóvenes vulnerables; facilitar el acceso y diversificar la educación
técnico-laboral que ofrece el Instituto Técnico de Capacitación y Productividad
(INTECAP); ampliar la oferta laboral para la juventud; promover el emprendimiento juvenil; promover
la erradicación de las peores formas de trabajo infantil y mejorar los
mecanismos de supervisión para el trabajo juvenil.
5. Impulsar campañas
de salud preventiva para la niñez, la adolescencia y la juventud: ampliar y mejorar los programas de
educación sexual y salud reproductiva en los centros educativos y comunidades;
mejorar los servicios de información para prevenir el consumo de drogas y
alcohol; promover programas comunitarios de educación en salud con
participación juvenil; ampliar y mejorar los programas de salud mental para la
adolescencia y la juventud; mejorar los mecanismos de coordinación entre el
Estado y la sociedad civil para implementar programas de salud mental.
6. Promover la
participación e incidencia juvenil en espacios de organización,
comunitaria, municipal y nacional: promover la formación de liderazgo
juvenil en la adolescencia y la juventud; promover la organización juvenil en
todas sus expresiones; promover la formación de liderazgo juvenil en la adolescencia
y la juventud; promover y fortalecer la participación juvenil en los espacios de toma de decisiones a nivel
municipal, departamental y nacional.
7. Promover programas
de inserción y re-inserción social para personas que pertenecen o pertenecieron
a una mara o pandilla, con miras a alejarlas de actividades violentas: crear centros de albergue temporal para
personas que pertenecen o pertenecieron a maras o pandillas y que estén
dispuestas a iniciar un proceso de inserción y reinserción social; crear
centros de orientación integral y una red de derivación; impulsar programas de educación, salud
integral, acceso al trabajo y participación; facilitar espacios de diálogo e
intercambio para el restablecimiento de las relaciones comunitarias en las
zonas afectadas por la violencia; promover que los medios de comunicación
informen de manera objetiva e imparcial sobre la violencia asociada con la
niñez, la adolescencia y la juventud.
8. Incrementar y
mejorar los servicios de atención integral a víctimas de violencia y promover
la aplicación de mecanismos de gestión y transformación de conflictos: incrementar las acciones estatales para la
protección de la niñez, la adolescencia, la juventud y las mujeres víctimas de
violencia; ampliar y mejorar los programas
de asistencia para la juventud migrante; impulsar programas y campañas de
información que contribuyan a evitar ser víctima de violencia; impulsar
programas de gestión y transformación de conflictos en las comunidades más
afectadas por la violencia.
9. Promover un enfoque
integral de prevención para mejorar la seguridad ciudadana: implementar medidas de prevención
situacional en zonas afectadas por la violencia; ampliar y mejorar las tareas
de prevención del delito y fortalecer el carácter comunitario de la policía;
priorizar la investigación criminal en delitos contra la vida y casos de
limpieza social; promover la
implementación de ley de armas y municiones; promover el control sobre el
expendio y comercialización de bebidas alcohólicas y embriagantes a personas
menores de edad; promover el fortalecimiento de la institución policial.
10. Agilizar la
tramitación de procesos penales y priorizar las medidas y sanciones distintas a
la privación de libertad: privilegiar la aplicación de
medidas y sanciones de libertad para adolescentes en conflicto con la ley
penal; crear casas socio-educativas para adolescentes en conflicto con la ley
penal, ampliar y mejorar las redes
institucionales y sociales de apoyo para adolescentes en conflicto con
la ley penal; agilizar la tramitación de procesos penales, racionalizar el uso
de la prisión preventiva y promover la aplicación de medidas
desjudicializadoras.
11. Promover programas de atención integral y
socialización para adolescentes en privación de libertad: programas de atención integral para
personas adolescentes en privación de libertad; monitoreo permanente sobre el
trato y funcionamiento de programas en centros de privación de libertad para
personas adolescentes en conflicto con la ley penal; crear programas de acompañamiento para
adolescentes en su fase post sanción; mejorar las condiciones de la Secretaría
de Bienestar Social para que cumpla los fines educativos de las medidas y
sanciones para adolescentes en conflicto con la ley penal.
12.Crear ampliar y
mejorar los programas de reinserción social para jóvenes en los centros a cargo
del Sistema Penitenciario: diseñar e implementar sistemas de seguridad para los distintos perfiles
de los centros de privación de libertad; implementación del régimen progresivo
en los centros de privación de libertad del país; atención especializada y
diferenciada a mujeres; promover la participación de personas que pertenecen o
pertenecieron a maras y pandillas en los programas de resocialización del
Sistema Penitenciario; adoptar medidas decididas y efectivas para evitar la
corrupción del Sistema Penitenciario. (Poljuve,
2010 pag.46-87)
8. ¿Cuál es la participación del Estado en evitar la violencia infantil,
de la adolescencia y juventud?
Se reconoce que el Estado es el principal responsable
de prevenir y reducir la violencia. También se reconoce que el Estado cuenta
con una estructura orgánica funcional para cumplir con dicha función. Bajo ése
marco, en esta sección se propone una serie de consideraciones y lineamientos
para que las instituciones estatales operen de manera coordinada para
implementar las estrategias y acciones de prevención que se presentaron
anteriormente. Las autoridades deben mostrar su disposición de enfrentar el
problema de la violencia a través de acciones concretas de prevención,
resolución y transformación de
conflictos. (Poljuve, 2010 pag.91-92)
Bibliografía
Poljuve. (2010). 12
Estrategias para Prevenir la Violencia Relacionada con la Adolescencia y la
Juventud. Guatemala: Interpeace Regional Office For Latin America.
No hay comentarios:
Publicar un comentario